Ubicada en el distrito de Las Minas, entre los corregimientos de El Toro y Chepo, Provincia de Herrera, se encuentra la reserva Forestal El Montuoso.
Este hermoso paraíso ambiental limita al norte, con el Río Tebario y Gato, al sur con el Río Suay, al este con Quebrada del Rosario y Loma, y al oeste con La Provincia de Veraguas y tiene una extensión de 12,419.22 hectáreas.
Esta Reserva Forestal comprende parches de bosques interconectados con bosques de galería. En el área la mayoría de las pendientes son fuertes, destacándose las elevaciones de la cordillera de La Huaca y la cordillera de El Montuoso.
UN LUGAR FASCINANTE
Un espacio ambiente de suma importancia ya que desde su elevaciones nacen importantes ríos, que abastecen de agua a más de 100,000 habitantes de la Península de Azuero, como son: La Villa, El Gato, Tebario, Mariato y Viejo.
El punto más alto es conocido como Alto Del Higo, desde donde se divisa el Golfo de Montijo en la costa del Océano Pacífico y el cerro Canajagua y el cerro Cacarañado.
La temperatura de la reserva es agradable durante todo el año y oscila entre los 21 - 25 0 C con un promedio anual de 24.5 0 C.
El recorrido del bosque se hace a través de un sendero donde se puede observar gran variedad de musgos, y helechos. También se observan algunas especies de orquídeas como la flor del Espíritu Santo, flor nacional.
PLANTAS Y ANIMALES LLAMATIVAS
Se han reportado dos especies muy raras en cuanto a su distribución: la planta insectívora (Drosera cayennensis), única de esta familia en Panamá, y el encino (Quercus corrugata), confirmado recientemente en esta zona.
Otras especies encontradas son: baco, malagueto macho, maría, pino nacional, espavé, balso, cope y algarrobo.
La fauna es un punto de interés, ya que se pueden encontrar iguana verde, mono aullador, mono cariblanco, ardillas, ñeque, conejo pintado, boa, saltarín gorgiblanco, trepatronco rojizo, tortolita rojiza, tinamú chico, moracho de sierra, rana neotropical, sábalo pipón, camarón rayado y caracol de río.
Por si fuera poco, durante el recorrido podrás observar representaciones gráficas grabadas en rocas o piedras hechos por nuestros antepasados prehistóricos, llamadas "petroglifos". La palabra proviene de los términos griegos petros (piedra) y glyphein (tallar) y fue en su origen acuñada en francés como pétroglyphe.
Para conocer este lugar sólo debes tomar la carretera asfaltada de Chitré a las Minas por una hora y 45 minutos. Dentro de la Reserva existen algunos caminos menores de tierra transitables en vehículos 4x4 en época de verano, ya que en invierno se hacen casi intransitables. Además, existe una pequeña red de caminos internos, que comunican las diversas comunidades existentes en la región.