Un nuevo informe del Fondo Mundial de Investigación de Cáncer (WCRF) advierte que los sándwiches con carnes procesadas, como jamón y salami, no se debe incluir en las meriendas de los niños, ya que años después le puede ocasionar cáncer.
Se trata, dicen los científicos, de tomar medidas en la infancia para que los niños no desarrollen el gusto por las carnes ahumadas, saladas o curadas.
El consumo de grandes cantidades de estos productos durante décadas puede aumentar el riesgo de cáncer de colon y recto, agregan los investigadores.