Más de 180 personas están afectadas por una situación incómoda con la nueva administración del Parque Recreativo Omar, en San Francisco.
Según la entrenadora física, Kathia Thomas, durante cinco años la Junta Comunal del corregimiento ha pactado con la administración del parque en referencia el uso de los terrenos para que las personas se ejerciten con aeróbicos, pero en los últimos días se ha venido presentando una situación penosa donde hasta se les ha prohibido usar la corriente eléctrica para la conexión del aparato de sonido. Además, se les ha prohibido el uso de la Casita Feliz, área techada, para los casos cuando llueve o para la atención de personas de la Tercera Edad que se ejercitan en el parque.
Aparentemente sólo se les permite el acceso a la Plaza de las Banderas o las áreas verdes, pero la entrenadora insiste en que las personas mayores no pueden someterse al sol.
Además, asegura que han recibido malos tratos expresos de la nueva administración.
Aclaró que las clases que allí se dictan son parte de un programa de la Junta Comunal para beneficio de la salud del pueblo.