La selección de Argentina derrotó ayer a la de Rusia 3-2, en un partido amistoso disputado en una cálida Moscú y en el que, tras empezar perdiendo, los pupilos de Diego Armando Maradona desplegaron todo su arsenal ofensivo para darle la vuelta al encuentro.
Con su victoria, Maradona y el combinado albiceleste reciben una importante inyección de confianza ante el crucial partido, del próximo 5 de septiembre, de clasificación para la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010.
El caso es que las cosas no parecían pintar para el combiando argentino, que, tras las conocidas lesiones de Tévez, Verón, Demichelis y Gago, vio cómo el barcelonista Leo Messi sufrió, la víspera, una contractura en el abductor y ni siquiera pudo ayer sentarse en el banquillo.
La ausencia de Messi se notó en la primera mitad, en la que el equipo local dirigido por el "mago" Hiddink dominó claramente el partido, aunque, a decir verdad, no llegó a disponer de muchas ocasiones de gol.
Sin duda, la estrella durante la primera parte fue Arshavin (Arsenal), que volvió loca a la defensa visitante y fabricó él solo el primer gol del encuentro. Arshavin se llevó a varios jugadores con una finta y, con un pase interior, dejó solo a Semshov, quien puso el 1-0 (m.17) con un disparo seco, que llegó a rozar el meta Andújar.
CALENDARIO
El próximo cinco de septiembre, los argentinos se enfrentarán ante Brasil de cara a las eliminatorias rumbo al Mundial Sudáfrica 2010.