Los cuerpos de tres hombres fueron encontrados en un potrero, uno encima del otro, en el área conocida como Filo de Cal, con evidentes signos de ejecución, cerca de Paso Canoas, en la tarde de ayer, miércoles.
Campesinos que pasaban por el lugar ubicado a unos 8 kilómetros de la zona comercial de Paso Canoas, sintieron el mal olor y cuando uno de ellos se asomó, vio el brazo de un hombre muerto.
Un policía de Tránsito que viajaba por esa carretera, la principal hacia el distrito de Renacimiento, fue quien bajó entre el monte y confirmó que se trataba de tres personas.
Desde la parte superior del área donde estaban los cadáveres que ya presentaban signos de putrefacción, se veía a uno de ellos con las manos amarradas a la espalda y una bolsa negra que cubría la cabeza. Debajo de él había otro sujeto y el tercero se situaba aproximadamente a un metro de distancia.
Al momento del levantamiento se desconocían las identidades de las víctimas, porque según José Henríquez, Fiscal Segundo Superior, se tuvo que hacer un reconocimiento general de los cuerpos y el área aprovechando la poca luz que quedaba al atardecer.
En el área se ubicó un vehículo marca Mitsubishi Láncer, que podría pertenecer a una de las víctimas.
Algunas personas manifestaron que un familiar había desaparecido desde el domingo pasado. En la escena mencionaron que el hombre dijo que iría a buscar una encomienda, pero nunca más lo vieron.
ANTECEDENTES
En un basurero clandestino de Filo de Cal, en los últimos días de enero de este año, las autoridades costarricense hallaron en un basurero del lado de Costa Rica, los cadáveres de cinco panameños, los cuales también estaban amordazados y con disparos en la cabeza.
Los asesinados fueron identificados como: Ángel Luis Pinzón, Eliécer Estribí Guerra, Víctor Manuel Navarro Otero, Adner Darío Moreno, Gustavo Alberto Otero Robles.
El caso aún es investigado tanto por las autoridades panameñas, como por las de Costa Rica.