En la primera semana de agosto estará en Panamá el juez magistrado español, Baltasar Garzón, dictando una conferencia sobre internacionalización de la justicia, un tema de profundas implicaciones en el mundo de hoy, estremecido en sus cimientos por los flagelos del narcotráfico, la corrupción y el terrorismo.
Su figura obtuvo resonancia internacional después de lograr la apertura de un juicio contra el exdictador chileno Augusto Pinochet, a quien acusó de torturas, genocidio y otros delitos. Garzón acusó a Pinochet Ugarte de la desaparición de más de cien españoles en Chile durante su mandato. Aprovechando una visita médica del militar a Londres, el juez español de la Audiencia Nacional ordenó su extradición; sin embargo, el primer ministro inglés Tony Blair decidió no conceder el pedido aduciendo razones humanitarias, y en cambio lo devolvió a su país de origen, con lo cual frustró las esperanzas de justicia de los familiares de los desaparecidos en ese país sureño.
En 1998 fruto de sus investigaciones fueron enviados a prisión altos funcionarios del gobierno español acusados de corrupción y sus biógrafos aseguran que sus acciones contra ETA le han llevado a la mira de este grupo terrorista en varias ocasiones, así como de la mafia en varios países. Hasta ahora su próxima presentación en nuestro medio no ha sido muy comentada. |