La empresa Kraft de Panamá, filial de Kraft Foods de Estados Unidos, anunció ayer el cierre de su planta y la reestructuración de sus áreas de operaciones y comerciales en el país centroamericano, tras el cese de 198 trabajadores.
El director de Asuntos Corporativos para Centroamérica y el Caribe de Kraft Foods, Mauricio Guerrero, dijo ayer que la empresa prescindirá de los servicios de 93 empleados en la planta y 105 en la sección de administración comercial.
La compañía, la segunda más grande en el mundo en el mercado de alimentos y bebidas, señaló que reconocerá las debidas compensaciones a estos 198 empleados "por encima de lo establecido por la Ley".
La planta, que tiene 39 años de estar operando "exitosamente" en Panamá, cerrará a partir del 30 de noviembre próximo y será trasladada a Venezuela, según una nota publicada por Kraft en la prensa local.
Una evaluación "minuciosa" de la sinergia y los niveles de eficiencia, en el marco de la economía globalizada actual, llevaron a los directivos de Kraft a tomar la "decisión corporativa" de clausurar la planta, en la que se produce quesos y mayonesa.
Kraft anunció que establecerá un "plan de asesoría" para entrenar a sus colaboradores en el planeamiento de su futuro laboral. La empresa anunció que los cambios no afectarán las actividades de suministro, comercialización y ventas, que seguirán operando normalmente en Panamá.
El año pasado Kraft cerró su planta de gelatinas y de polvos de hornear a raíz de que Puerto Rico había dejado de comprar estos productos, y se decidió trasladarla a Costa Rica porque era sub-utilizada, según una fuente de la compañía.
Kraft Foods, considerada una empresa líder en el mercado de alimentos y bebidas en los Estados Unidos, comercializa en más de 145 países marcas reconocidas mundialmente como queso Kraft, galletas Nabisco y refresco Tang, entre otras. |