A veces es por timidez y otras veces por no querer relacionarse con los demás, hay adultos y jóvenes, que no le hablan a sus compañeros Esta situación se observa en las empresas al igual que en los colegios. Son individuos que no participan en nada. No hablan, ni para decir su nombre, ni para dar los buenos días o hasta mañana.
Esta gente necesita mucho de la sociedad, pues viven en este mundo, pero dentro otro submundo en el cual sólo existen ellos. Lo recomendable para estos casos, es sacarles conversación, preguntarles cómo les va, qué hicieron ayer, saludarlos, desearles buen día.
De esta forma, ya no se sentirán excluidos y, por el contrario, veremos enormes cambios en sus conductas y los veremos más atentos a lo que ocurre a su alrededor. Si logramos sacarles, aunque sea la vocal "A", poco a poco le veremos salir de la concha en donde siempre se han escondido. |