Con la presentación del proyecto que crea la Autoridad de Aseo Urbano y Domiciliario al pleno de la Asamblea Nacional, el alcalde Bosco Vallarino pierde el control administrativo del sistema de recolección de la basura en el distrito capital.
El proyecto fue presentado por el ministro de Salud, Franklin Vergara. El documento señala que será la gerencia de la Autoridad la que fije la nueva tarifa o tasa del servicio prestado y cobrar los servicios ordinarios y especiales que se brinden relacionados con el aseo urbano.
La Autoridad recibirá todos los bienes, el personal y los recursos financieros presupuestarios correspondientes.
Se resalta que los municipios del país, con excepción del Municipio de Panamá, podrán seguir operando el manejo y disposición final de los desechos sólidos hasta que la Autoridad los incluya dentro del plan de gestión voluntaria.
Vergara manifestó que desde el año 1984, fecha en que se creó la Dirección Metropolitana de Aseo con el objeto de planificar, investigar, dirigir, inspeccionar y operar los servicios relacionados con el aseo urbano y domiciliario hasta el año 1999, en el cual se transfieren dichos servicios de la región metropolitana a los Municipios de Panamá, San Miguelito y Colón, el problema se ha agravado.
El proyecto crea un fondo de aseo público, dentro del cual se asignarán recursos para el manejo de los servicios de aseo y se establece un sistema ágil para que, a través de la jurisdicción coactiva, se recupere la cuantiosa deuda que existe en este concepto.
La situación de la DIMAUD es caótica, ya que cuenta con 52 camiones recolectores, y de esos seis funcionaban actualmente. La DIMAUD tiene 3341 trabajadores y gasta en salarios $17 millones.
En el año 2009, la entidad tenía un presupuesto de $21.5 millones, pero se gastaron $32 millones.
El presupuesto estimado para este año 2010 es de $37 millones, $16 millones más que el presupuesto de 2009, pero el problema es que en 2010 se estima que sólo recaudarán $26 millones, lo que genera una situación deficitaria.
La DIMAUD tiene una cuenta por cobrar de $47 millones y les adeuda a los proveedores cerca de $15 millones.