Beyoncé Knowles va a tener que dejar de moverse para que en su cuerpo no corra ni una gota de sudor.
Esto se debe a que Beyoncé ha pedido a los fotógrafos que no le saquen tomas de espalda, en su actual gira mundial, porque podría ver lo mucho que suda durante sus actuaciones y eso es algo que odia con toda el alma.
Según los fotógrafos, esto es algo imposible, pues se mueve mucho.