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El vicepresidente de EU, Dick Cheney, enfrenta serias acusaciones por corrupción.  |
Judicial Watch, un grupo que investiga la corrupción entre funcionarios gubernamentales, dijo ayer que planea interponer una demanda contra el vicepresidente estadounidense Dick Cheney y la empresa para la cual trabajaba, Halliburton Co., por prácticas contables presuntamente fraudulentas.
La demanda contra Cheney y "otros directores de Halliburton involucrados" será por "prácticas contables presuntamente fraudulentas que resultaron en la sobrevaloración de las acciones de la compañía, defraudando por tanto a inversores y a otras personas", indica Judicial Watch (Vigilancia Judicial) en un comunicado.
Halliburton, gigante de servicios petroleros con sede en Texas, reconoció a fines de mayo que estaba siendo investigada por la comisión de valores (SEC) por sus prácticas contables, cuando Cheney fungía como presidente de la compañía entre 1995 y 2000.
El anuncio de la demanda, que será interpuesta (no se especifica cuándo) en Dallas, Texas, se produce en momentos en que una seguidilla de escándalos empresariales socavó la confianza de los inversores y cuando se hurga en el propio pasado de Cheney, como ejecutivo de empresas petroleras del presidente George W. Bush.
La acción legal se produce asimismo un día después que Bush prometió perseguir con más firmeza y castigar con mayor severidad a los directores empresariales que cometan delitos.
"Mi gobierno hará todo lo posible para poner fin a la era del trucaje de las cuentas, del maquillaje de la verdad y de los incumplimientos de la ley", declaró ayer ante un grupo de empresarios a escasos metros de Wall Street.
"Irónicamente," dice Judicial Watch en su comunicado, "luce como si el apuro del presidente en proponer más regulaciones sobre la industria privada, tenga la intención de desviar la atención de sus prácticas empresariales impropias y las de su vicepresidente".
"Mirar hacia otra parte para el vicepresidente implicaría sentar un precedente de que la elite de Washington está por encima de la ley. Esto no puede ser permitido si nuestra democracia ha de sobrevivir", dijo el presidente de Judicial Watch, Larry Klayman.
Halliburton dijo que cree que la investigación de la SEC surgió a partir de un artículo publicado en mayo por el diario The New York Times, sobre el tratamiento contable dado solicitudes de trabajos de construcción y ordenes de cobro.
Según el Times, bajo la presidencia de Cheney, Halliburton alteró sus políticas contables para poder informar como ganancias más de 100 millones en costos, que eran disputados en grandes proyectos de construcción.
El diario dijo que el cambio fue aprobado por Arthur Andersen, el auditor de la compañía, en momentos en que Halliburton sufría grandes pérdidas en algunos de sus contratos a largo plazo.
Halliburton dijo que "cree que contabilizó solicitudes de construcción y órdenes de cobro, de acuerdo con los principios contables generalmente aceptados en la industria de la construcción", añadiendo que "cooperará completamente con la SEC". |