La paciencia del ministro de Trabajo, Reynaldo Rivera, se acabó y tildó ayer al SUNTRACS de manejarse con intereses políticos y una agenda oculta.
Rivera le envió un mensaje a la dirigencia obrera para deje de estar amenazando con un paro de labores cuando se están tomando las medidas para evitar los accidentes de trabajo.
"Pidieron más inspectores, se les consiguió una partida especial para nombrarlos y también se quejan. Pedían que se aprobará el convenio 167 de la OIT sobre la seguridad, y se hizo, pero ahora buscan otra excusa para amenazar con paro", sostuvo Rivera.
El dirigente del SUNTRACS, Saúl Méndez, insistió en que el gobierno ha estado manejando las cosas a su manera, por ello la posición que ha asumido la dirigencia obrera.