|
"Nuestra filosofía", dice la gente de Hogares CREA-Panamá, "se basa en la fe del hombre en el hombre, en el amor al prójimo, en la creencia de que cada individuo nace con un sentido de dignidad y orgullo propio, con el deseo de amar y ser amado, de ser aceptado, de sentirse útil y participar...". También creen que "...la adicción (a las drogas) responde a una mala estructuración de la personalidad del individuo, puesto que debido a una inversión de valores (valores entendidos al revés), no ha podido fortalecer su carácter, controlar su temperamento, ni encauzar -en vías productivas- sus habilidades innatas, o (sus) talentos...". ¡Maravillosos...! Conceptos filosóficos realmente maravillosos que no deben ser tomados a la ligera. Y es que los dos conceptos aquí citados -salidos de Hogares CREA- nos están diciendo una sola cosa: ¡Deformación psicológica de la personalidad!. Pero la otra verdad que encierra lo anterior, no se refleja únicamente en la falta de voluntad que muchos de nosotros no tenemos...
El gran problema de la adicción es, a mi parecer, que se la quiere enclaustrar dentro de las tradicionales sustancias alucinógenas que existen, como si éstas fueran las únicas que hacen -o causan- el mayor daño. Pues les diré una cosa. Medio Panamá se ha convertido en adicto, no de las drogas, pero sí de algo tan dañino como esas sustancias. Hablamos de aquella música que de "Fidanque a Toledano" se la quiere identificar como propio del estilo de vida de los panameños que responde a nuestra idiosincrasia, a lo cual me opondré siempre. Son las cinco de la mañana, y usted puede escuchar cualquier cantidad de emisoras lavándole el cerebro a los estudiantes con pura basura... unos viajando en su "busito", otros en un colectivo, y todavía otros en algún taxi. Pero que se entienda: escuchar música a las cinco de la mañana no es malo, lo malo está en que aparejado con eso que los D.J.'s llaman "música", va acompañado de interminables alaridos y cuñas de doble sentido incitando a lo sensual, lo vulgar y lo obsceno.
De hecho, cuando los CREANOS hablan de "...inversión de valores...", con lo anterior tenemos una muestra patética de lo que eso significa. Esos estudiantes, así despertados, llegan a su escuela o colegio, total y completamente "drogados", donde todo lo que ven, y a lo único que quieren prestarle atención, es, precisamente, a sus compinches que también llegan en igual condiciones. En otras palabras, sus habilidades y talentos son desviados de tal forma por esos despiadados D.J.'s, que luego en la calle, en un bus, en un campo de juego, y a veces hasta en la misma casa o colegio, esos muchachos dan rienda suelta a tanta emoción reprimida e imitando al personaje de la canción que por horas han estado escuchando, terminan cometiendo actos que, invariablemente, "...responden a una mala estructuración de la personalidad... no pudiendo fortalecer su carácter ni controlar su temperamento...", gracias, repetimos, a los conductores de tanta basura que ellos llaman "música".
Así las cosas, creo que la comunidad en general, pero la juventud de un modo muy particular, se beneficiaría grandemente, si se le diera a la gente de Hogares CREA, la oportunidad de "hacer radio" para reeducar a aquellos que juran que en los estiercoleros que promueven los D.J.'s lo están logrando. |
