Argentina ganó 4-1, Maradona supo hacer muy bien sus cambios, todo tranquilo, esperan a Grecia, frotó su lámpara maravillosa y salieron los genios. Pero hoy prefiero hablar del Uruguay. Es difícil criticar a un equipo con 4 puntos en dos partidos, que no ha permitido goles y ganó 3 a 0 a los anfitriones del mundial, pero a Uruguay le cuesta hilvanar dos pases seguidos. Es más fuerte sin la pelota. Defiende bien y recupera ahogando al contrario, ya sea en el uno contra uno o por la disposición de su línea extrema. Recupera, lanza, la pierde y vuelve a recuperar. La toma, como sea Luis Suárez, hace la individual, tira al gol. La recuperan, la toma Forlán, el más 'criterioso' de los uruguayos, busca espacio, ¡bomba ¡ La Jabulani roza en un contrario y hace una parábola increíble... golazo. Se lo merece Forlán. Uruguay 1 Sudáfrica 0.
Vuelve la lucha, a Uruguay le conviene la fricción y va agotando a los contrarios, impone su mayor experiencia. Es el líder del grupo. Lo merece, juega a que no haya juego: pero válgale a cada cual sus artes, si lo llevan al triunfo, y por 3-0, mejor.
Me pongo a dudar si lo que veo es cierto, pero oigo a un comentarista invitado, y no de los usuales de ESPN, y coincidimos. Él dice que a Uruguay le falta volumen de juego, tocar, tocar y rotar a sus hombres, ganar espacios con dominio de la pelota, es verdad, llega de atropellada, con faltas recibidas, de pelota parada, de jugadas individuales, sin el toquetoque.
Puede mejorar, debe agruparse, fue fundamental que Forlán jugara como enganche. Supe que él mismo le pidió eso a Oscar Tabárez, su director técnico. Quiso arrancar de más atrás y apoyar a Cavani y a Suárez. Miren que Uruguay jugó con tres delanteros. Hasta ahora noto que a la Celeste le falta la mano de un mejor técnico, aunque al que tiene le dicen el "Maestro". Tenían 20 años de no ganar en un Mundial. Ahora le toca a México sufrirlo. Lo veo mal.