Más rápido de lo que se persigna un ñato, Dámaso Espino está asimilando los trucos de su nueva posición: la receptoría.
Espino, quien está cumpliendo su sexta campaña en la pelota profesional viene practicando su nueva posición desde fines de 2004 y de acuerdo con el pelotero ha logrado tomar las nuevas enseñanzas.
A pesar de que hace unas semanas, Espino fue bajado de la Clase A fuerte a la Clase A suave, el pelotero no se ha amilanado, pues ahora su presencia en el terreno de juegos es más seguida.
"Sí, estoy en la Midwest League. Me dijeron que querían que viniera acá para jugar todos los días a fin de aprender más rápido. En California eramos 2 catchers y estábamos jugando dos partidos cada uno con dos días libres, dijo Espino.
"Aprender a ser receptor no es fácil. Es la posición más difícil del béisbol. Aprendí bastante jugando en la Clase A fuerte, porque tenía 2 días libres para ver y aprender", agregó.
El metropolitano afirmó que gracias a Dios todo está saliendo bien y que seguirá trabajando duro para salir adelante.
"Ya estoy lo suficientemente avanzado para jugar más y estoy contento que tengo la oportunidad de hacerlo casi todos los días".
"Aquí hay mucho trabajo físico. Pero lo más importante es la parte mental", puntualizó.