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Se teme que las declaraciones de Chavéz caucen una dismonución de las inversiones extranjeras en Venezuela. Foto AP  |
La amenaza del presidente venezolano Hugo Chávez de expulsar del país a los extranjeros que hablen mal de Venezuela, proferida en un foro económico el domingo, desató ayer un encendido debate con sus opositores que rechazan la advertencia en innumerables declaraciones.
"Extranjero que venga aquí a decir algo que sea una afrenta contra el país o el gobierno o el presidente o el pueblo, será expulsado de Venezuela a partir de hoy, sea quien sea, porque este país hay que respetarlo", dijo Chávez el domingo en el mencionado foro económico.
Según sus opositores, Chávez se molestó por las afirmaciones de la ex candidata presidencial de Perú Lourdes Flores en un foro organizado por el partido democristiano, en el marco del cual ella comparó al ex presidente peruano Alberto Fujimori con el mandatario venezolano.
"Al que le caiga la chupa que se la ponga.Si el presidente se siente tan afectado por la comparación con Fujimori, quiere decir que él también se da cuenta de que hay signos muy claros de que su régimen evoluciona en una dirección autoritaria, no democrática", declaró el dirigente opositor democristiano Eduardo Fernández.
Fernández defendió a Lourdes Flores al señalar que ella sólo describió que el gobierno de Fujimori pasó de ser un régimen muy popular a uno "autoritario, tramposo y corrupto, que, además, no resolvió ninguno de los problemas del pueblo peruano, y eso, precisamente, es lo que está pasando en Venezuela".
Por su parte, el ex candidato presidencial venezolano Francisco Arias Cárdenas, acotó que con las nuevas amenazas el gobierno de Chávez "se revela chauvinista".
Arias Cárdenas y Fernández esgrimieron que el artículo 57 de la Constitución, que garantiza la libertad de expresión, no hace diferencia entre persona nacional o extranjera.
Para el presidente de la Cámara de Industria y Comercio Venezolano-Americana, Pedro Palma, el mandatario sólo mostró su irritación momentánea pero estimó que eso no significará un cambio en su política de apertura en materia de libertad de expresión. |
