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CRIMENES FAMOSOS
¿Defensa propia o asesinato?

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Por Max Hines
Colaborador

Sea usted el juez y jurado de este caso inglés. Es tiempo de jurado. Usted es un miembro del jurado que está escuchando la evidencia, así como lo hizo el jurado inglés en 1959. El caso de hoy involucra al acusado, Cavan Malone, quien se declara inocente por razones de defensa propia. Listos... aquí vamos.

En la tarde del 14 de febrero de 1959, Cavan estaba en casa con su madre, Hazel Malone, y su amiga, Bessie Momberg, de 37 años, cuando el marido separado de Bessie, Jan, apareció repentinamente en su piso de Londres.

Jan, quien había estado separado de su esposa por más de un año, estaba más borracho que una cuba. No dijo una palabra, pero cuando la madre de Cavan le ofreció un trago, se puso furioso y agarró a la aterrorizada mujer por las muñecas. Bessie le gritó a Cavan, "Ayuda a tu madre. Probablemente la matará". Cavan respondió también gritando, "La ayudaré, lo sacaré de aquí". Esta no era la primera vez que Jan había seguido a Bessie. En el pasado, había implorado a su esposa que volviera a él. A menudo, aparecía borracho en funciones sociales y hostigaba a la pobre mujer. En ocasiones, había sido necesario contenerlo físicamente.

Cavan corrió al vestíbulo a tiempo para ver a Jan darle un puñetazo en la cara a su madre y un segundo golpe en la nuca mientras ella se volvía para huir. El llegó hasta el lado de su madre justo mientras ella se liberaba y corría hasta la sala.

Cavan se enfrentó a Jan e intentó hablar con el violento sujeto, quien estaba decidido a recuperar a su esposa. No sirvió de nada. Jan dio a Cavan varios golpes mientras los dos hombres luchaban en el vestíbulo.

Finalmente, Cavan se soltó, corrió a la sala y volvió con un cuchillo. Mantuvo el cuchillo a la distancia del brazo. Su atacante ignoró el arma y avanzó. Saltó hacia Cavan justo cuando Cavan cerró los ojos y empujó el cuchillo hacia delante, apuñalando a Jan en la garganta.

HOMBRE HERIDO

De acuerdo a Cavan, cuando vio sangre quedó horrorizado y retrocedió, corriendo del vestíbulo a la sala. Jan lo siguió y nuevamente los hombres se trabaron en lucha. El hombre herido llevaba las de ganar contra Cavan. En la pelea, el cuchillo entró dos veces en el pecho de Jan. Este cayó al suelo completamente muerto.

En la superficie, parecía que Cavan había ciertamente actuado en defensa propia. Su madre había sido atacada por un loco. Su propia vida había con seguridad estado en juego. Pero esperen.

Un mes después de la muerte de Jan Momberg, Cavan fue llevado a juicio por su asesinato. Entren a la corte y escuchen la evidencia.

Cavan subió al estrado para su propia defensa y contó esta historia: "Vi a Momberg golpear a mi madre en la mejilla y lo vi golpearla en la nuca. Lo empujé hacia atrás. Quería alejarlo de mi madre. Quería sacarlo del apartamento si era posible. Cuando mi madre se fue, me atacó a mí. Yo estaba llevando la peor parte. Pensé que si conseguía algo con qué golpearlo podría detenerlo. Corrí a la sala. Vi un cuchillo y pensé que lo asustaría y podría atemorizarlo para que se fuera." Siguió describiendo la primera cuchillada, pero no podía recordar haberlo apuñalado a Jan dos veces más.

Bessie Momberg subió al estrado y recontó la historia de su desgraciado matrimonio: "Dejé de vivir con mi marido alrededor de un año atrás. El frecuentemente me perseguía y yo rehusaba volver a él. Acostumbraba ir a casa de amigos, incluyendo a la Sra. Malone, para esconderme de él."

Verificó la versión de Cavan de lo que había ocurrido en la tarde de la tragedia, añadiendo que la mayor parte del tiempo ella había estado buscando un lugar donde esconderse de su enfurecido marido.

ACTO CRIMINAL

Resumiendo, el abogado de Cavan señaló que si una persona es atacada, puede defenderse por todos los medios razonables posibles y si se produce una muerte como resultado, tanto intencional como involuntariamente, la persona no es culpable de un acto criminal. Además señaló que medios razonables podían definirse como una fuerza igual a aquella usada por el atacante.

Es verdad que Cavan había sido provocado. Cualquier hombre razonable hubiera venido en defensa de su propia madre. Estaba también la posibilidad de que él o la Sra. Momberg hubieran sido asesinados si no hubiera actuado de la manera en que lo hizo.

Ah, pero el fiscal no lo veía de ese modo. Señaló que en el momento del apuñalamiento, Jan Momberg no estaba atacando a la madre de Cavan. Esa pelea había terminado.

Cuando Cavan dejó el vestíbulo y volvió con el cuchillo, era en efecto un hombre armado enfrentando a un hombre desarmado, quien en ese momento no estaba poniendo en peligro la vida de nadie.

Le fue dejado al juez que presidía instruir al jurado. Declaró que la provocación no es una excusa para matar, no se puede volver con un veredicto de no culpable de asesinato basado solamente en la provocación.

En cuanto a defensa propia, el erudito juez dijo al jurado que si ellos sentían que la muerte había sido causada por el acusado al actuar razonablemente en defensa propia, debían volver con un veredicto de inocente.

Añadió que el tiempo lo es todo en determinar defensa propia. Si una persona se desquita cuando el peligro de ataque ha terminado, no es defensa propia, sino venganza.

El jurado fue dejado con una elección de tres veredictos posibles. Culpable de asesinato, culpable de homicidio sin premeditación o inocente. ¿Cuál sería su veredicto?

EL VEREDICTO - El jurado encontró a Calvin Malone inocente.

 

 

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EL VEREDICTO - El jurado encontró a Calvin Malone inocente.

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