 |
Mencionó que los victimarios son en su mayoría adultos y familiares, entre los que sobresalen los padres, padrastros, tíos, abuelos, primos y vecinos.  |
Autoridades médicas de la provincia de Chiriquí manifestaron su preocupación por los altos índices de violencia intrafamiliar que se han registrado durante las últimas semanas en la región, que han cobrado la vida de varias personas.
Hugo Moreno, funcionario del Departamento de Medicatura Forense del Ministerio Público, aseguró que los casos se han incrementado considerablemente a partir de finales de los años 90.
Explicó que antes de 1999 no existían tantos hechos violentos de trascendencia, como se han dado en el presente.
Dijo que cada vez son más frecuentes las situaciones graves y como se presentan son verdaderamente preocupantes, pues se puede determinar que se cometen con el objetivo de acabar con la vida de la víctima.
Señaló que como el problema radica en el hogar, es muy importante que se pueda concienciar a la familia a través de charlas y de grupos de ayuda dentro de la comunidad, para que se eviten en lo posible los traumatismos intrafamiliares.
Explicó que estos hechos se generan en mujeres, niños, abuelos y algunos casos en hombres.
El galeno trajo a colación los últimos dos casos de homicidio, donde el que más llamó la atención fue el de la ciudadana María Mora, quien mató y descuartizó a su esposo Alexis Centeno, con quien había compartido su vida durante 20 años.
Indicó que por el sentimiento de culpa posterior al hecho, la mujer considerando su situación, ha intentado quitarse la vida en dos ocasiones, mientras se mantenía recluida, lo que según el experto es una característica muy particular en estos casos.
Explicó que se ha determinado realizar a la presunta homicida algunos exámenes médicos psiquiátricos para evaluar la posibilidad de que pueda existir una lesión o tumor en la cabeza, que haya influído para cometer el crimen.
Destacó que el segundo caso lamentable es el de Andrés Palacios, de 20 años, quien acabó con la vida de su cuñado Mártir Bejerano, de 27 años, con un pedazo de madera y un azadón.
Generalizando los hechos, Moreno dijo que algunos de los factores que inciden para llevar a cabo estas acciones podrían ser el alcoholismo, la drogadicción, síndromes depresivos, problemas maritales y económicos.
Manifestó que debe insistirse en la educación, ética y moral, que debe empezar desde el hogar, donde se refleja el primer ejemplo; posteriormente en la escuela y en la sociedad.
Mientras tanto, la consultora del Fondo de Población de las Naciones Unidas, Rosa Ramos, indicó que las mayores víctimas del abuso y de violación carnal en el país siguen siendo los niños, niñas y las adolescentes.
Las declaraciones de Ramos se dieron durante su participación en el seminario de capacitación denominado "El Abuso Sexual de Niños, Niñas y Adolescentes", coordinado por el Departamento de Promoción de la Región de Salud de Panamá Oeste.
Aunque no se dio a conocer cifras sobre los casos de abuso y violación sexual registradas en nuestro país, se informó que los casos están aumentando, por lo que se hizo un llamado a los padres de familia para que estén atentos a todo lo que los hijos les dicen, además de promover la confianza en el hogar. |