El llanto es una respuesta emocional a una experiencia o situación de sufrimiento. Los niños lloran por muchas razones y el grado de su angustia depende de los niveles de desarrollo y de las experiencias previas. El llanto en los niños es una respuesta al dolor, al temor, a la tristeza, a la frustración, a la confusión, a la ira, a la incapacidad para expresar sus sentimientos de una manera adecuada.