Siempre hemos escuchado la frase "si tomas no manejes". Crecimos con ella y hoy día se mantiene como un legado para todos aquellos que manejamos y nos gustan de vez en cuando unos refrescos.
Pero la seguridad es primero y por eso es importante que sepas que un sólo trago de licor que ingieras, puede marcarte el cambio entre la vida y el más allá.
Recientemente se conoció de varios estudios que demostraron que la incidencia de los jóvenes con el alcohol va en aumento cada vez más.
Se habla de que un 85 por ciento de personas que no superan los 35 años, tienen o han tenido un contacto con las bebidas alcohólicas o se han pegado su "juma".
Los efectos que te pueden causar en moderadas condiciones son: Perturba la razón y el juicio, Retarda los reflejos, Dificulta el habla y el control muscular, Provoca la pérdida del equilibrio, *Disminuir la agudeza visual y auditiva , Relajar y disminuir la ansiedad , Dificultar la capacidad de reacción
EN GRANDES CANTIDADES PUEDE:
Provocar pérdida de conocimiento, Dificultar la respiración
Alterar el funcionamiento general del hígado provocando un daño celular que se traduce, finalmente, en cirrosis hepática.
¡Te ánimas a tomar!