NO HA CONSIDERADO DESTITUCIONESN
OTAN lanza nuevos ataques tras pedir disculpas por destrozar embajada china

Belgrado
AP

Sin arredrarse por la indignación que provocó el bombardeo accidental de la embajada china en Belgrado, la OTAN atacó ayer nuevas posiciones del ejército yugoslavo en Kosovo.

La alianza lanzó racimos de bombas sobre la aldea de Djakovica, en el oeste de Kosovo, que causaron graves daños y obligaron a columnas de albano-kosovares a huir, informó la agencia noticiosa oficial yugoslava Tanjug. No se divulgaron otros detalles ni hubo manera de confirmar esta información con otras fuentes. Dirigentes de la OTAN se disculparon nuevamente por el bombardeo de la embajada, pero aseguraron que los ataques continuarán hasta que el presidente yugoslavo Slobodan Milosevic acepte sus condiciones para Kosovo. En el 47mo día de bombardeos, el vocero de la OTAN, Jamie Shea, dijo que "hasta ahora hemos alcanzado 1.900 blancos'', aunque aclaró que en algunos casos eran bombardeos sucesivos al mismo lugar.

"Hemos lanzado unas 9.000 piezas, sean misiles o bombas y sólo 12 erraron el blanco'', dijo Shea. "Es menos del uno por ciento, así que seguimos apuntando con precisión''.

El Pentágono y la CIA dijeron que el bombardeo de la embajada se debió a un error de información que provocó una mala elección del blanco.

En Londres, el ministro de las Fuerzas Armadas británico Doug Henderson dijo en conferencia de prensa que "no hubo ni hay alternativa a la campaña aérea de la OTAN'', y agregó que la campaña "es justa y necesaria''. Hablando en el estado de Oklahoma, el presidente norteamericano Bill Clinton dijo que el bombardeo de la embajada fue "un trágico error'', pero trató de hacer hincapié en los esfuerzos de la OTAN por minimizar el daño a los civiles en su campaña contra las fuerzas de Milosevic.

Clinton le echó a Milosevic la culpa por el errado ataque. Dijo que los bombardeos habrían acabado hace tiempo si el líder yugoslavo hubiera cesado su campaña de expulsar de sus hogares a los kosovares de ascendencia albanesa. "Hay que ver las cosas en su justa proporción'', dijo Clinton. Aun así, reiteró su renuencia a usar la fuerza.

"Odio esto'', dijo Clinton. "Pero alguien, alguna vez, tiene que hacerle frente a esta suerte de expulsión étnica''.

En Belgrado, el viceprimer ministro Danilo Vuksanovic dijo que "el frente contra el agresor (la OTAN) se amplía. Serbia y Montenegro jamás capitularán a los agresores ni cederán un centímetro de su territorio''. Sin embargo, el presidente de Montenegro, Milo Djukanovic, y el dirigente opositor Zoran Djindjic reclamaron reformas democráticas y el aislamiento de Milosevic una vez que terminen los bombardeos.

"Es imposible imaginar que se pueda establecer la democracia en nuestro país sin una transición política total en Serbia y Yugoslavia'', dijeron en un comunicado conjunto que la AP recibió por fax.

En Bruselas, Shea dijo que la OTAN reclama una investigación plena del asesinato del destacado político albano-kosovar Fehmi Agani, cuyo cadáver apareció en una aldea de Kosovo. Las autoridades serbias y los dirigentes albano-kosovares se han acusado mutuamente del asesinato de Agani, colaborador del líder moderado Ibrahim Rugova.

"Parece un nuevo caso para el Tribunal Internacional de La Haya'', dijo Shea.

Antenoche, misiles de la OTAN se estrellaron en la región kosovar de Decani, dijo la agencia estatal de noticias Tanjug.

El Ejército de Liberación de Kosovo ha dicho que trata de abrir un corredor en dicha zona para infiltrar combatientes, armas y otros suministros de la cercana Albania para aliviar la presión a sus unidades guerrilleras escasas de parque.

 

 

 

 

 




 

Dirigentes de la OTAN se disculparon nuevamente por el bombardeo de la embajada, pero aseguraron que los ataques continuarán hasta que el presidente yugoslavo Slobodan Milosevic acepte sus condiciones para Kosovo.

 

PRIMERA PLANA | PORTADA | NACIONALES | OPINION | PROVINCIAS | DEPORTES | LATINOAMERICA | COMUNIDAD | REPORTAJES | VARIEDADES | CRONICA ROJA | EDICIONES ANTERIORES


   Copyright 1995-1999, Derechos Reservados EPASA, Editora Panamá América, S.A.