Los incendios en la provincia de Chiriquí se han podido controlar, sin embargo aún inciden los problemas debido a la falta de conciencia, sobre todo de los agricultores, quienes buscando la alternativa más fácil, y optan por la quema como una manera de preparar el terreno para la próxima siembra.
Esto se da debido a la cultura agrícola que se desarrolla en Panamá, producto de las tradiciones del campesino que en muchos casos no guarda las proporciones necesarias para evitar situaciones lamentables.
Durante el primer cuatrimestre han sido devastadas 266 hectáreas de terreno por el fuego, destacando el incendio en el área de Potrero Seco, dentro del Parque Nacional Volcán Barú, el cual consumió unas 175 hectáreas.
Los mayores problemas de quema se presentan en las áreas agrícolas de la provincia, donde es casi una práctica común.
Las consecuencias se han logrado disminuir con la capacitación a los agricultores, no obstante aún se mantienen cifras que preocupan.
El único camino para controlar el fenómeno de los incendios forestales y reducir los daños, es la prevención. |