HOJA SUELTA
¡Narices!
Eduardo Soto
La nariz es un adminículo
formado de carnes y cartílagos que le sobresale a todos en la cara,
y sirve de escalón entre la frente y la boca. Hay narices largas
y rectas, como las de las estatuas griegas; las hay negras y anchas, con
forma de un titánico nudo corredizo o de marañón; también
las hay respingadas y pecosas (como se la describió Mark Twain a
Tom Sawyer), y hay otras con forma de gancho, que a los teóricos
nórdicos les ha dado por llamar "aguileñas", pero
que en el trópico se les denomina "de perico". A los ñatos
(esa pobre gente sin escalón en el rostro ni espejos en la casa)
les dicen "nariz de patacón" por razones obvias.
¡Ah!, la nariz se usa para respirar, cuando quien lo hace no está
bajo el agua.
Existen personas con la nariz enorme y fea, con las fosas demasiado a
la vista, de manera que parecen la entrada a dos profundas y tenebrosas
cavernas que esconden secretos primitivos y murciélagos por centenares.
Así le pintó al carbón la nariz Sofía Gandarias
a Pablo Neruda, y él nunca se quejó porque verdad que la tenía
grande.
Hay muy pocas personas con esta herramienta perfilada, perfecta, con
los rasgos sutiles y tersos, casi como hechos con pincel electrónico
en la computadora. Este reducido grupo de gente trabaja en televisión
y en las revistas de modas.
Creo que Dios hizo a Adán y Eva sin narices, pero se las puso
a última hora cuando descubrió que era más romántico
voltear la cabeza para besarse.
Desde entonces las mujeres "asoman las narices" en las cuentas
bancarias de sus maridos, y los hombres "no ven más allá
de sus narices" cuando les gusta una dama y hacen lo que sea por conquistarla.
Lo primero que aprenden a arreglar los cirujanos plásticos son
las narices. Los derechistas del continente se arreglan la suya en Miami
o en Argentina, y los de izquierda se van a Cuba. Unos y otros pagan lo
que sea por enderezar con bisturí lo que la naturaleza puso chueco,
y luego salen reídos para darle la cara al mundo sin vergüenza.
Me he puesto a pensar en esto ahora que "los observadores políticos"
aseguran que quien gane las elecciones del 2 de mayo lo hará "por
una nariz".
Si de narices se trata, para sacar al posible ganador hay que preguntarse
cuál de las tres nóminas tiene las narices más bonitas
o más largas.
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