Con mucha fe y convencido de que la justicia existe, se encuentra aún privado de libertad en el Centro Penitenciario de Nueva Esperanza en Colón, el capitán del equipo de fútbol Colón C3, Ferney Agrono Saavedra.
El futbolista de origen colombiano, quien hace tres meses fue detenido por supuestas acusaciones de un testigo protegido de haber participado en un doble homicidio en el mes de febrero de este año, mantiene la confianza en que la justicia divina está por encima que la del hombre, y más temprano que tarde, la verdad triunfará.
Ese doble homicidio en el que se le involucra al deportista, se registró en la comunidad de Villa Guadalupe Sector B, del corregimiento de Cativá, en Colón, donde murieron dos hombres a tiros.
"A pesar de todo lo que estoy pasando me encuentro muy tranquilo, porque tengo la confianza en Dios de que todo se va a resolver lo más pronto posible", dijo con optimismo Ferney, que no ha parado de practicar dentro del penal lo que más le gusta, el fútbol, y que por primera vez conversa con un medio de comunicación después de su encierro.
"Él sabe que soy inocente" , expresó Agrono refiriéndose a Dios, después de que participó junto a su equipo C3 de la entrega de implementos para un partido de fútbol que se realizará en el CRNE. Agrono conversó con la estudiante de periodismo, Yelena Alvear, a quien contó las vicisitudes de su vida.
Mientras espera que todo se resuelva en la parte legal, Ferney aporta en lo que puede a la selección de fútbol del Centro Penitenciario de Colón. "Nunca le he reprochado a Dios ¿porqué a mí?".
Ferney señaló que toda su vida se ha dedicado a enseñar a niños y jóvenes el deporte del fútbol, que es lo único que sabe hacer muy bien, y no entiende cómo lo han querido embarrar con un hecho tan horrible como un doble homicidio.
