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Expresó que siente temor porque la idea de su invento le sea arrebatada, ya que lleva cerca de cinco años tratando de legalizar la documentación que lo acreditan como único propietario de la ratonera múltiple.  |
Un panameño, inventor de una trampa múltiple de ratones, teme porque su creatividad sea plagiada y comercializada deslealmente dentro o fuera del país. Isidoro Castañedas, cansado de los ratones que rodeaban los lugares donde vivía, decidió, hace cinco años, inventar la manera de acabarlos sin dejar uno sólo, al estilo del flautista de Hamelin, pero siente que su sueño se frustra al ver cierta demora en el manejo legal que su abogado le está dando a la solicitud de patente de invención. Sostuvo que por razones económicas no ha podido hacer el primer prototipo del invento y el apoderado legal que designó para tramitarle la solicitud de patente le está dando vueltas al asunto.
Castañeda manifestó que su trampa de ratones está diseñada para atrapar hasta tres roedores a la misma vez. Brevemente explicó que los roedores entran a la caja atraídos por señuelos que son difíciles de ignorar por estos peludos animalitos.
Señaló que su ratonera múltiple puede ser construida de una especie de material plástico, resistente a las mordeduras de ratones que quedan herméticamente encajonados en la trampa. El señor Castañeda manifestó a Crítica que desde niño siente ese deseo inventivo por buscarle soluciones a los problemas que le rodea.
Expresó que siente temor porque la idea de su invento le sea arrebatada, ya que lleva cerca de cinco años tratando de legalizar la documentación que lo acreditan como único propietario de la ratonera múltiple.
Este ingenioso panameño señaló que su abogado es el que le ha estado dando largas al asunto en las oficinas de patentes del Ministerio de Comercio e Industria. "Este abogado ha estado llevando mi caso con una lentitud que me preocupa y temo que me puedan arrebatar mi idea", dijo.
Castañeda manifestó que ha desembolsado cerca de B/.200 en concepto de papeleo para ver su sueño realizado, sin embargo la espera parece ser más larga. "En estos momentos no tengo para producir mi invento, pero mi intención es la de poder vender la patente a un gran comerciante que la produzca al por mayor, en beneficio de los panameños", expresó. |
