El presidente cubano, Fidel Castro, denunció la presencia del anticastrista Luis Posada Carriles en territorio de EEUU, pidió explicaciones al gobierno de Washington al respecto, y a la Unión Europea (UE), una reacción política.
Castro acusó al gobierno de George W. Bush de ofrecer refugio a Posada Carriles, que está acusado por Cuba de múltiples actos y atentados terroristas contra la isla, junto con otros tres anticastristas, en una comparecencia especial de unas tres horas ante dirigentes del gobierno y familiares de las víctimas.
"Una indignante y repugnante maniobra está en marcha", recalcó Castro y se refirió a informaciones de la prensa de EE.UU. según las cuales, Posada Carriles, a quien calificó de "monstruo", podría lograr la residencia en el país norteño, sobre lo cual señaló que hay "un silencio total en ese país".
Castro dijo que "la idea inicial era mantener secretamente a Posada en ese país" hasta que la finalizara la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de la ONU, en Ginebra, donde EE.UU. promueve un proyecto de resolución para condenar a Cuba que debe ser sometido a votación en los próximos días.
Repasó el amplio expediente de Posada Carriles y reiteró las acusaciones cubanas sobre su participación en sabotajes como el del avión de "Cubana de Aviación", en Barbados, en 1976, que causó la muerte de 73 personas.
También recordó que personalmente denunció un plan de atentado contra su vida durante la X Cumbre Iberoamericana en Panamá, en el año 2.000, en el que estuvo involucrado Posada Carriles junto con Gaspar Jiménez, Pedro Remón y Guillermo Novo.
Los cuatro anticastristas fueron detenidos, condenados, y en agosto pasado fueron indultados por la entonces presidenta de Panamá, Mireya Moscoso.
DENUNCIA
Castro dijo que habría que preguntar al presidente George W. Bush si "sabía o no sabía que Posada Carriles está en EE.UU. desde hace tres semanas".