Soy una mujer de 45 años y gozo de bastante buena salud. Hace unas cuantas semanas, empecé a notar que me dolía el pecho cuando daba mis paseos diarios, en especial cuando subía una cuesta. Mi doctora me mandó a que me hicieran un examen cardíaco completo y mi corazón estaba estupendamente. Ella cree que tengo una inflamación de la cavidad costal. ¿Qué es eso exactamente?
R: Si usted siente un dolor agudo en el pecho, lo primero que se imagina es que está teniendo un ataque al corazón. Es posible. Llame siempre al médico en caso de que le duela el pecho al hacer un esfuerzo, ya que un enfermedad cardíaca puede producir dicho dolor. Sin embargo, en ocasiones lo que causa el dolor en el pecho son las costillas, el cartílago y los músculos que hay entre las costillas, y no el corazón. Dicho dolor en el pecho normalmente no es grave. De su descripción se deduce que usted tiene costocondritis, una enfermedad relativamente inofensiva que ha provocado que más de una persona acuda a los servicios de urgencias.
La costocondritis es una inflamación de alguna de las articulaciones costocondriales (también llamadas cartílagos costales) que articulan las costillas con el esternón a ambos lados de la cavidad costal (véase gráfico adjunto). Las mujeres son especialmente vulnerables, y suman el 70% de los casos que se producen. La costocondritis puede ocurrir a cualquier edad, pero mayormente suele darse en personas activas. Puede ser el resultado de una actividad física estresante fuera de lo normal. La causa conocida más común es que sea producto de una lesión traumática, como puede ser un accidente automovilístico en el que el pecho del conductor se golpea con el volante.
El síntoma principal de la costocondritis es un dolor agudo a lo largo de los bordes delanteros del esternón, en las articulaciones costocondriales. El dolor es más común en el lado izquierdo, y puede que se extienda hacia la espalda o el abdomen o a lo largo del brazo. Esta es una de las razones por las que en forma tan frecuente se confunde erróneamente con un infarto. Sin embargo, durante un infarto, el dolor inicial se siente en la mayoría de las ocasiones en el centro del pecho, debajo del esternón, no en uno de los lados del pecho.
La costocondritis empeora si mueve el torso o respira profundamente. Los ejercicios físicos, como empujar hacia arriba, también pueden agravar el dolor. Por lo general no se observa ninguna anormalidad, aunque en el síndrome Tietze, una variante de la costocondritis, los cartílagos costales afectados se hinchan.
La intensidad o gravedad del dolor de la costocondritis tal vez aumente o disminuya en el plazo de una semana o de varios meses. Esta enfermedad no ocasiona ningún problema a largo plazo, y es poco probable que vuelva a producirse. Las infecciones respiratorias puede que también provoquen una costocondritis porque la infección viral puede inflamar las articulaciones costocondriales. La opresión al toser también puede provocar la enfermedad. En casos excepcionales, la enfermedad es el resultado de infecciones bacterianas producto de la medicación de fármacos vía intravenosa o por operaciones quirúrgicas en la parte superior del pecho.
Las personas que han sido operadas del corazón son especialmente susceptibles de padecer la costocondritis. En la mayoría de los casos, sin embargo, no es posible hallar una causa concreta.
Si usted tiene un dolor agudo en el pecho y no está seguro de la causa, póngase en contacto inmediatamente con su médico o vaya a urgencias.
Un médico comprobará su historial y le practicará un reconocimiento físico con objeto de detectar o descartar una enfermedad cardiaca u otros problemas médicos graves. Dependiendo de dicho reconocimiento, el médico también puede pedir que se le practiquen análisis de sangre, radiografías del pecho y un electrocardiograma.
Como parte del reconocimiento físico, el médico presionará en diferentes puntos (incluyendo las articulaciones costocondriales) cerca de donde usted siente el dolor. Si tiene costocondritis, la articulación inflamada le dolerá. De hecho, si le duele el pecho, usted puede probar presionando en diferentes puntos de su pecho cerca de donde siente el dolor. Si uno de dichos puntos le duele mucho al presionarlo, no dude en contárselo a su médico.
Medicamentos anti-inflamatorios no esteroides, tales como la aspirina, el ibuprofeno y el naproxeno normalmente son un tratamiento eficaz para la costocondritis. La medicación debe tomarse durante unos cuantos días para lograr que surta efecto completamente, y seguirá teniendo efecto sólo si se toma en las dosis recetadas.
Las compresas frías o los apósitos calientes también pueden servir. Pruebe ambos, y siga utilizando lo que le haya ido mejor. Llevar un sujetador especial de refuerzo también puede proporcionarle cierta mejoría. Evite realizar actividades que puedan agravar los síntomas. Por ejemplo, llevar una riñonera o una mochila tal vez empeore el dolor. Ciertos ejercicios físicos y una respiración profunda quizá ralenticen el proceso de curación.
Si se tratan, los síntomas empiezan a desaparecer en el plazo de una semana. Si la costocondritis no responde a los medicamentos y a un tratamiento convencional, puede que su médico sugiera una inyección de esteroides. En una pequeña parte de los casos, tal vez sea necesario una intervención quirúrgica para extirpar el cartílago doloroso. |