El nombramiento del hombre de negocios Ahmed Chalabi como abanderado del gobierno interino de Irak demuestra que el dúo de halcones Donald Rumsfeld y Dick Cheney no comprende la constelación política de la región.
CHARLATÁN
Se considera a Chalabi tan sólo como un charlatán y esta opinión es compartida por el mundo financiero ginebrino. Chalabi se vio involucrado en la quiebra fraudulenta del banco ginebrino Socofi. La entidad bancaria fue constituida en 1984 como el bastión financiero del clan de Chalabi.
Durante cinco años, concedió sin control alguno créditos por la suma de 50 millones de dólares a los hermanos Chalabi, quienes utilizaron los fondos para financiar oscuras operaciones comerciales en Beirut y Jordania.
En 1992, Ahmed Chalabi fue condenado en ausencia por un tribunal militar de Ammán a 22 años de cárcel, por malversaciones cometidas con un banco local. Para evadir la condena, Chalabi abandonó el país ocultándose en el portaequipajes de un automóvil. El Pentágono ha atribuido un papel protagonista en el nuevo Gobierno a Chalabi, un hombre de negocios de 58 años de edad y jefe del Congreso Nacional Iraquí. |