OPINION

CREO SER UN BUEN CIUDADANO
Sin embargo, no aprendo de los errores

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Redacción
Crítica en Línea

Si te equivocaste una vez, por qué te ocurre lo mismo la segunda y otra tercera ocasión. ¿Es que no fue suficiente el haber cometido el mismo error dos veces? A mucha gente no le gustará que este escrito inicie muy regañón, pero no hay otra manera de decirle a este grupo de panameños, que equivocarse es normal, aquí lo malo es hacerlo más de una vez.

El hombre inteligente aprende de los errores. Los chicos se caen del patín o la bici, y no vuelven a hacer lo mismo porque les dolió, verdad... Entonces, vamos al tema, por qué las jovencitas son tan tercas de tropezar con el mismo hombre, una y otra vez; un ser inhumano que lo único que le brinda es inseguridad, golpes, ultrajes, en fin, no les ofrece una vida mejor.

El amor no es un juego como algunos le llaman. Es un sentimiento que se da sin condiciones, sin esperar nada a cambio. Se ofrece todo, pero en ciertas circunstancias, ocurren tragedias las que son difíciles superar, pues la víctima se enconcha para no salir más al mundo real; aunque otros lo intentan nuevamente sin asimilar la lección. Si a través del tacto sentimos que nos quemamos cuando agarramos una olla sin guantes especiales, ¿por qué obstinarnos en agarrarla si sabemos que nos hará daño?

Muchos han salido airosos de los errores. La ciencia es un ejemplo de ello. Alexander Graham Bell, por ejemplo, diseñó un aparato telefónico luego de ensayo y error. Poco a poco fue modificando hasta alcanzar lo óptimo. Cometer errores es atreverse a ir en búsqueda de la conquista, pero salgamos con buenas ganas para triunfar en lo profesional y en lo sentimental.

 

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