Columnas de sindicalistas, piqueteros y simpatizantes de organizaciones sociales próximas al Partido Justicialista (PJ, en el poder) avanzaron desde primeras horas por las principales vías de la ciudad para alcanzar la Plaza de Mayo, donde Fernández pronunció un mensaje a la nación.
Después de tres meses de gestión, la presidenta enfrenta una crisis causada por la protesta de los productores agrarios en contra del incremento de los impuestos a la exportación de granos.
La convocatoria de ayer, según analistas locales, constituye una nueva demostración de fuerza tras el acto en respaldo de la mandataria organizado por su esposo y antecesor en el cargo, Néstor Kirchner, la pasada semana.