Rechazan ofrecimiento de Milosevic
por mediación rusa
Alemania
AP
El presidente yugoslavo Slobodan
Milosevic está dispuesto a reanudar las conversaciones sobre Kosovo
si la OTAN deja de bombardear Yugoslavia, afirmó ayer el primer ministro
ruso.
Yevgeny Primakov dijo que el ofrecimiento de Milosevic fue el resultado
de seis horas de conversaciones que sostuvieron ayer los dos mandatarios
en Belgrado. Fue el esfuerzo diplomático de mayor relieve para poner
fin al conflicto.
Pero el canciller Gerhard Schroeder dijo que la oferta de Milosevic era
inaceptable.
"Esta no es una base para una solución política'',
adujo Schroeder, quien habló en nombre de la Unión Europea
de 15 miembros, cuya presidencia rotativa está actualmente en manos
de Alemania.
Después de reunirse con Primakov, el canciller dijo que hablaría
en las próximas horas con representantes de la OTAN, aunque dijo
estar seguro de que éstos también rechazarían la oferta.
Primakov habló a los periodistas después de llegar a Bonn
para informar al canciller alemán Gerhard Schroeder, actual presidente
de la Unión Europea de 15 miembros.
"Milosevic está dispuesto a hallar una solución política
a todas las cuestiones si cesa el bombardeo'', dijo Primakov por medio de
un intérprete. Agregó que Milosevic estaba listo a entablar
negociaciones constructivas''.
Agregó que Milosevic desea que el objetivo de las conversaciones
respete "los intereses de todos los grupos en Kosovo'', una referencia
a la minoría serbia en la provincia yugoslava de mayoría albanesa.
Milosevic también se comprometió a reducir la presencia
militar yugoslava en Kosovo si la OTAN cesa sus ataques, dijo el primer
ministro ruso. También indicó que Milosevic insiste en medidas
para desarmar a los rebeldes de ascendencia albanesa.
Pero Schroeder dijo que es inaceptable la condición de que la
OTAN cese sus ataques primero.
"La señal que espera la comunidad internacional es el retiro
de las unidades militares y paramilitares yugoslavas de Kosovo'', dijo el
canciller.
Antes del anuncio de Primakov, el ministro de defensa alemán dijo
que Milosevic "tratará en las próximas dos a tres semanas
de convertir Kosovo en una región de aldeas destruidas en las que
la población masculina adulta haya sido internada o muerta y el resto
desplazado''.
El ministro de defensa Rudolf Scharping dijo que Milosevic no cejará
hasta que logre su objetivo de deshacerse de los albaneses en Kosovo. "Entonces,
lo que ofrecerá será la paz de la tumba'', sentenció.
Para impedirlo, la OTAN "está determinada a continuar sus
actividades militares hasta que se destruya la capacidad del ejército
yugoslavo de cometer genocidio en Kosovo'', dijo Scharping en una conferencia
de prensa.
Destacó, empero, que la OTAN no tiene planes por ahora de enviar
tropas de infantería a la convulsionada provincia yugoslava.
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