El vínculo entre el tenista chileno Fernando González y su técnico, el argentino Horacio de la Peña, parece haber llegado a su fin tras casi cinco años de éxitos.
Horacio de la Peña llegó ayer a Santiago, después de haber acordado con su pupilo "darse un respiro" de un mes antes de resolver si seguirán trabajando juntos, tras la eliminación del tenista en la tercera ronda del torneo de Cayo Vizcaíno.
"Fue una charla que tuvimos y es un momento en que nos tomamos un espacio para ver las cosas desde fuera y saber qué está pasando, descubrir por qué es tan difícil darse cuenta de lo que pasa en la cancha".
Según comentó ayer la prensa chilena, De La Peña siente que "Mano de Piedra", actual número 19 del mundo, no muestra el entusiasmo de antes en los entrenamientos y en los partidos no acata sus instrucciones.
Por el lado de González, según las mismas fuentes, el tenista siente que con el argentino no podrá dar el nuevo salto que necesita su carrera para situarse entre los diez mejores del mundo.
El técnico argentino dijo hoy que González ya no aplica tanto las enseñanzas que él le puede entregar, principalmente debido al largo tiempo en que han trabajado juntos.