" ¡Se lo llevaron todo!", exclamó el dueño de la empresa Art Joyeros, que se dedica a la venta al por mayor de oro y plata en la Zona Libre de Colón.
La impotencia era obvia. El propietario lloraba desconsoladamente al ver que cargaron con todas las prendas de oro que se encontraban en la bóveda de la empresa y que estaban valoradas en aproximadamente dos millones de dólares.
Los primeros en darse cuenta del hurto fueron los empleados del almacén.
Los funcionarios de la Dirección de Investigación Judicial (DIJ) que investigaban dentro de la empresa vieron un boquete en el techo y otro en la bóveda.
La pregunta que se hacían todos era ¿dónde están huellas y las herramientas que se usaron para hacer el trabajo profesional, de abrir una bóveda de acero? No había nada que los delatara.
Los sujetos cargaron con todo el oro y otro grupo de prendas de plata.
El departamento de seguridad de la Zona Libre de Colón revisa las cámaras de vigilancia que dan acceso a esa joyería, pero nada sospechoso ha sido grabado.
Esa joyería queda cerca de otras que funcionan en la misma zona.