Los pacientes con insuficiencia renal crónica comenzaron una huelga de hambre desde ayer, en la parte exterior de la iglesia del Carmen, vía España, ante la falta de una atención.
Alexander Pineda, presidente de la Asociación de Pacientes Renales, y familiares denunciaron que los pacientes están sometidos al hacinamiento que se viven en la sala de hemodiálisis, escasez de medicamentos e insumos para optimizar la atención.