REFLECTOR
El cine podría pasar a segundo plano
en entrega de premios Oscar
Hollywood
REUTERS
La ceremonia número
71 de los premios Oscar, a realizarse hoy domingo en el Dorothy Chandler
Pavilion de Los Angeles, premiará a lo mejor del cine del último
año, pero el séptimo arte podría pasar a segundo plano
si se concretan las protestas programadas contra un galardonado.
Guionistas, actores y directores que figuraron en la lista negra durante
las purgas anticomunistas de la década de 1950 prometieron concentrarse
frente al teatro para expresar su desacuerdo con el Oscar especial que dará
la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas a Elia Kazan.
La protesta se hará porque Kazan delató a sus ex correligionarios
comunistas en 1952 ante la Comisión de Actividades Antiestadounidenses
de la Cámara de Representantes y aparte de eso luego contrató
páginas en algunos diarios para expresar su satisfacción con
su decisión.
Los organizadores de la protesta dijeron que esperaban que decenas de
personas se les sumen en la manifestación a realizarse antes de la
ceremonia, la que comenzará a las 5 de la tarde (0100 GMT) en el
teatro situado en el centro de Los Angeles.
La cadena ABC, que transmitirá la ceremonia, comenzará
una hora antes a dar ambiente cinematográfico a la tarde con un programa
especial de la periodista Barbara Walters, la que entrevistará a
Elizabeth Taylor, Susan Sarandon y Céline Dion.
Los productores de la transmisión prometieron enfocar las cámaras
en la protesta de afuera, la que se hará en momentos en que ocurra
el acostumbrado ritual de la llegada de las estrellas en limosinas vistiendo
ropa de los más destacados diseñadores mientras el público
las observa desde la tribuna tradicional.
Al contrario de lo que pasó en 1998, cuando "Titanic"
arrasó con la competencia y se llevó 11 estatuillas para igualar
el récord de "Ben Hur", lo que llevó a su director
James Cameron a autocoronarse "el rey del mundo", casi todas las
categorías están intensamente disputadas.
Tomando en cuenta que "Saving Private Ryan" (Rescatando al
soldado Ryan) prácticamente no tiene competencia para ganar el Oscar
a la Mejor película, las sorpresas pueden estar en las otras categorías.
En la competencia por el Oscar al Mejor Actor, Tom Hanks, dos veces
ganador de la estatuilla, tendrá una dura competencia si quiere hacerse
del tercer galardón por su excelente trabajo en "Saving Private
Ryan".
Sus rivales serán el comediante italiano Roberto Benigni, por
la sátira del holocausto "La vida es bella"; el ardiente
héroe hollywoodense Nick Nolte ("Afflicción"); el
novato Edward Norton ("Historia Secreta de EEUU) y el mejor actor vivo
de Gran Bretaña, Sir Ian McKellen ("Dioses y monstruos)
Benigni llega a la final trayendo el prestigioso premio al mejor actor
del Sindicato de Actores, lo que podría haber convencido a algunos
miembros de la academia que hubiesen estado indecisos.
En la categoría de Mejor Actriz, se miden la australiana Cate
Blanchett, por "Elizabeth"; la bella estadounidense Gwyneth Paltrow,
por "Shakespeare apasionado"; la brillante actriz brasileña
Fernanda Montenegro por su papel como la estafadora que descubre que tiene
un corazón en "Estación Central".
También aspiran a la estatuilla a la mejor actriz la británica
Emily Watson en el papel de la trágica cellista Jacqueline du Pré
en "Hilary y Jackie", y la estadounidense Meryl Streep por el
papel de una madre condenada a morir de cáncer en "One Sure
Thing" (Las cosas que importan).
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