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Ricardo Martinelli
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El mandatario Ricardo Martinelli exclamó ayer que "no le cree nada" a la ex embajadora norteamericana Barbara Stephenson, y denunció que las diferencias que hubo entre ambos, fue porque la diplomática buscaba beneficiar a empresas estadounidenses.
"Yo a esa señora embajadora no le creo nada; las diferencias que tuve con ella fueron porque ella quería hacer las cosas a su manera.. yo quería que bajara la luz, y aquí había una señora que me decía que yo no podía bajar la luz, porque esa era una compañía americana. ¿A mí que me importa que sea una compañía americana?, yo lo que quiero es que el pueblo panameño tenga luz más barata. Si por hacer eso dice que soy un peligro, pues seré un peligro", sentenció Martinelli al comentar las filtraciones de Wikileaks, publicadas por Panamá América.
También alegó que los comentarios que se le atribuyen al ex magistrado Adán Arnulfo Arjona, en los que tildaba de corruptos a sus colegas, le parecen injustos, porque los debió haber hecho a la luz pública cuando era integrante de la Corte Suprema.
Mientras, el ex presidente Martín Torrijos, quien estuvo anoche en el acto de celebración de los 32 años de fundación del PRD, dijo no temer a la publicación de Wikileaks ligadas a su administración. "No tengo miedo a esos Wikileaks", indicó.
"En mis cinco años de mandato me entrevisté seis veces con el presidente Bush (George), eso significa que mi administración tuvo buenas relaciones con los Estados Unidos", agregó.
Sobre la reforma Constitucional se mostró partidario de una Constituyente, pero opinó que la propuesta actual es una "cortina de humo" para distraer la atención de temas nacionales y para recortar la veda presidencial de diez a cinco años.
"El doctor Ítalo Antinori (designado como coordinador de la consulta constitucional) goza de mucha credibilidad, pero el Gobierno no tiene esa misma credibilidad", dijo Torrijos.
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