La jueza Leonie Brinkema autorizó que continúe el juicio contra Zacarías Moussaoui, único procesado en EE.UU. en relación con los atentados del 11 de septiembre de 2001, lo que permite que el Gobierno siga solicitando la pena de muerte contra él.
Brinkema suspendió el lunes durante 48 horas el juicio, que se sigue en un juzgado de Alexandria (Virginia), en las afueras de la capital estadounidense, en la quinta jornada del mismo.
La paralización del juicio se produjo después de que la fiscalía confirmase que Carla Martin, una abogada del Gobierno, había informado a siete futuros testigos de lo que habían declarado otras personas, en violación de los reglamentos judiciales.
Brinkema había prohibido en una orden emitida el 22 de febrero que los testigos "asistan o sigan en cualquier otra forma los procedimientos judiciales, incluyendo leer transcripciones, antes de que testifiquen".
Moussaoui es el único procesado en Estados Unidos en relación con los atentados del 11 de septiembre de 2001.