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Elizabeth Smart pasó su primer día en su hogar después de su secuestro hace nueve meses, mirando una de sus películas favoritas junto con su familia y tocando el arpa. "¡Es cierto! No tengo palabras para decirles lo feliz que estoy, el milagro y respuesta a las plegarias que ha sido todo esto", dijo su padre, Ed Smart.
Mientras la familia Smart y los investigadores empezaban a armar trabajosamente el rompecabezas de lo que ocurrió con Elizabeth, Brian Mitchell y Wanda Barzee quedaron detenidos en la cárcel del condado de Salt Lake bajo sospecha de secuestro con agravantes, dijo Kent Morgan, procurador general del condado.
La jovencita fue hallada el miércoles junto con la pareja después que algunos residentes vieron a los tres caminando por una calle suburbana. Elizabeth y Barzee vestían velos deshilachados y transportaban catres y valijas, y los tres tenían pelucas.
Cuando la policía los interrogó por primera vez en al calle, Elizabeth dijo que la pareja eran sus padres, dijo Troy Rasmussen, policía de Sandy. "Sólo admitió la verdad a último momento", acotó el sargento Víctor Quezada. "Tenía aspecto sumamente nervioso y no nos miraba directamente". |
