El 95% de la población indígena está desempleada, lo que significa que la hambruna está azotando a miles y miles de moradores de la comarca Ngöbe Buglé.
En este verano enfrentan la peor de las crisis económicas, porque no hay lluvias para sembrar maíz ni arroz que son los principales rubros que se cultivan en el área.
José Elinthong, gobernador comarcal, admitió que la situación es bastante delicada en esta región del país, y los problemas internos que se han registrado en la comarca con los caciques impide la utilización de B/.33 millones para el desarrollo de proyectos que se habían planificados.
Indicó que la mayoría de los Ngöbe Buglé sacan a sus hijos de las escuelas y los llevan a otras provincias como Chiriquí, Bocas del Toro o Costa Rica en busca de mejores condiciones de vida y en busca de un trabajo en el cual puedan sustentar a su familia.
Agregó que la constante emigración de indígenas hacia Costa Rica ha creado ciertos problemas en algunas comunidades costarricenses, como consecuencia de la falta de alimentos que escasea en la región comarcal. Organismos internacionales como Naciones Unidas han declarado a los indígenas como grupos minoritarios que tienen graves problemas sociales y reciben pocos ingresos, prevaleciendo el hambre.