El director Ejecutivo de Transparencia Internacional (TI), Fernando Berguido, afirmó ayer que la inmunidad parlamentaria se ha convertido en un "manto de impunidad absoluta" ante una serie de hechos cuestionados y abogó para que la misma sólo funcione cuando los legisladores estén sesionando.
La reacción surge ante la defensa que hizo el presidente de la Asamblea Legislativa, Jacobo Salas, a la figura de la inmunidad durante el acto protocolar de reinicio de las sesiones ordinarias.
Berguido cuestionó el argumento planteado por Salas sobre que la inmunidad contribuye a la labor fiscalizadora que ejerce la Asamblea tanto a los órganos Ejecutivos y Judicial.