La familia de Cecilia Cubas, la hija del ex presidente paraguayo Raúl Cubas que había sido secuestrada en septiembre pasado y cuyo cadáver fue hallado el miércoles, reclamó la pena de muerte para los autores de este tipo de delitos.
"Las penas tienen que ser aumentadas, yo pediría y firmaría para que los secuestradores tengan penas mucho mayores y soy partidario en estos casos, por qué no decirlo, de la pena de muerte", afirmó Carlos Cubas, tío de Cecilia y ministro del Interior durante el gobierno de su hermano.
En Paraguay la máxima pena es de 30 años y para los delitos de secuestro la condena puede llegar a quince años de cárcel. Agregó que el autor de un crimen como el secuestro y asesinato de su sobrina tendría que ser sometido al menos a 25 años de trabajos forzados "como se hacía con los presos de antes, encadenado".
CONSPIRACION IZQUIERDISTA
Cubas abonó la hipótesis de la Fiscalía de las presuntas vinculaciones del miembro del Partido Patria Libre (PPL, izquierda) Osmar Martínez, apresado en enero pasado como principal sospechoso, con Rodrigo Granda, uno de los jefes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), preso desde el 14 de diciembre pasado.
"Las FARC constituyen media Colombia, así es que tiene un poder político económico fuerte", señaló.
Dos días antes del hallazgo del cadáver de Cecilia, secuestrada el 21 de septiembre pasado cerca de su casa por un grupo armado, la Fiscalía ofreció detalles de un presunto cruce de correo electrónico entre Martínez y Granda, en el que el primero pedía asesoramiento para negociar con la familia Cubas.
Los Cubas mantuvieron un cerrado hermetismo, hasta que el 26 de noviembre pasado rompieron el silencio para declarar que habían pagado, el 12 de noviembre, una fuerte suma de dinero sin que Cecilia, que tenía 32 años, fuera liberada.
