Llegar a casa después de un ajetreado día de trabajo o arribar a la oficina luego de un tranque descomunal, lo que uno quiere es encontrar un ambiente placentero.
Las pequeñas fuentes de agua contribuyen al equilibrio de las cargas iónicas del aire, que influyen en nuestro estado de ánimo, y dan la sensación de que el ambiente está más fresco y el aire más limpio.
UNA BUENA FUENTE PARA INTERIORES:
Ser estéticamente agradable.
Producir un sonido de intensidad muy moderado. Un sonido fuerte puede parecer atractivo al principio, pero se volverá molestoso después de pocos minutos.
Tener una bomba impulsora de muy buena calidad: el zumbido del pequeño motor debe ser prácticamente imperceptible.
No salpicar demasiado mientras funciona.
Las piedras ideales, por sus propiedades iónicas, son el cuarzo, el granito y la mica.
El agua debe caer en un único sentido.