Es un hecho preocupante y la verdad es que todos estamos expuestos a padecerla: la depresión.
Es un sensación que invade el cuerpo de un tristeza, sintiéndose decaído emocionalmente, incluso se pierde el interés en las cosas que antes disfrutaba.
Amigo, usted debe saber que la depresión es una enfermedad como puede ser la diabetes o la artritis, y no es sólo una sensación de desánimo. Esta enfermedad progresa cada día afectando sus pensamientos, sentimientos, salud física, y su forma de comportarse.
Por eso, desde que usted comienza a sentirse solo porque las cosas no resultan como usted espera, debe buscar ayuda en sus familiares o amigos cercanos.
La depresión no es culpa de quien la la padece, como tampoco es una debilidad de la personalidad. Es una enfermedad médica frecuente y puede afectar a cualquier persona, porque no distingue sexo o edad.
Querido lector, si se encuentra en una situación emocionalmente mala (pérdida de un familiar, o un problema de trabajo), pueden desencadenar la depresión o provocar que el paciente no se pueda recuperar completamente, pero en otras ocasiones se presenta incluso cuando todo en sus vidas marcha bien.
El desconocimiento de la depresión como enfermedad con todos sus posibles síntomas lleva a las personas a culparse a si mismas por los síntomas, y no saben que existen tratamientos para la enfermedad. Por ello si se presentan algunos síntomas de la depresión debe de ponerse en contacto con su médico.
No se deje morir por aquellas cosas que crea no tiene solución, mejor respire profundo, cierre los ojos, y más que nada, converse, porque lo peor es guardarse los problemas.
El tratamiento contra la depresión ayuda a reducir la preocupación, y así se reanude la vida normal que lo hacía pasar días placenteros.