Ahora, duerme debajo de un árbol, observando lo que fue hogar. Roberto Alveo, es un humilde campesino que todos los días sale a las 3: 00 a.m. de su precaria residencia en Chigoré de Penonomé hacia el mercado público a vender legumbres, verduras y frutas, nunca pensó que el destino le jugaría una mala pasada, pues al regresar en la tarde encontró su casa hecha cenizas, nada se pudo hacer y lo perdió todo.
Con lágrimas en su rostro y con dificultad para contar su triste caso, el señor Alveo, conocido cariñosamente por todos como "Chorrera", por ser originario de este sector, contó a este medio que el pasado 8 de febrero perdió todo, "no tengo nada, todo se quemó, que voy a hacer, necesito ayuda".
Las lágrimas corrían por las mejillas de "Chorrera", quien tenía con sacrificios una casita hace más de tres años en la comunidad de Chigoré en Penonomé, él salió a trabajar en la madrugada, pero en horas de la tarde un vecino fue al mercado de Penonomé a informarle que lamentablemente su casa se estaba quemando, "corrí para ver que podía salvar, pero todo fue inútil, ya se había quemado todo".
"Chorrera" sólo quedó con la ropa que tenía puesta, todo se quemó en aquel siniestro que lo dejó en la calle y sin alimentos, vestuarios ni una cama para dormir, pues anoche tuvo que dormir a orillas de un árbol contemplando lo que fue en alguna oportunidad su residencia de zinc.
Este humilde hombre no sabe que sucedió o porque se le quemó su residencia, al área llegaron los bomberos, pero por la distancia y difícil acceso al área era imposible salvar la residencia.
Al área se presentó el gobernador de Coclé, Darío Fernández, quien le prometió ayuda a este humilde hombre que está en la calle, ayer se encontraba en el mercado como todos los días vendiendo algo de sus productos para poder comer, mientras esperaba ayuda que se le prometió, sin embargo aún cargaba puesta la única ropa que se salvó del incendio.
Por su parte, el Coronel Pacífico Marciaga Díaz, director de la Oficina de Seguridad y jefe del Cuerpo de Bomberos de Bomberos de Penonomé señaló que lamentablemente se dio este siniestro en donde un humilde campesino perdió la residencia que estaba construida con zinc.
DIA DEL INCIDENTE OCHO DE FEBRERO
"Salí a trabajar en la madrugada, horas más tarde, un vecino fue al mercado de a informarme que mi casa se estaba quemando, se quemó todo", dijo Roberto Alveo.