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Los asesinatos de personas cuyos cuerpos han aparecido decapitados o con otras mutilaciones son "noticias macabras que están indicando una descomposición social que está gritando ir a las causas", afirmó ayer el obispo auxiliar de San Salvador, Gregorio Rosa Chávez. El prelado dijo, en una rueda de prensa, que debe investigarse "quién está detrás" de esos hechos y "qué pretende".
Rosa Chávez indicó que si se trata de riñas entre pandillas las autoridades deben buscar medidas que no agraven más la situación, sino programas que ayuden a salir a los jóvenes de las mismas, ya que "se estaría tratando de apagar el fuego con gasolina".
El pasado viernes, unos niños encontraron una mochila que contenía la cabeza de una estudiante universitaria que había sido dejada bajo una banca en una parada de autobuses en el municipio de Colón, en el departamento central de La Libertad. El cuerpo de la joven, identificada como Zuleyma del Carmen Guevara, aún no ha sido encontrado.
El mismo día, otro niño encontró un brazo y un dedo de un hombre dentro un maletín que había sido dejado debajo de una banca en el parque central de la ciudad de San Martín, situada en las afueras de San Salvador.
Desde diciembre pasado se han registrado cuatro casos de mujeres decapitadas en distintos lugares del país y el cuerpo de otra apareció sin un brazo. En la mayoría de los casos, las investigaciones policiales han apuntado a riñas entre pandilleros, pero en el de la joven universitaria Zuleyma del Carmen Guevara se descarta esa posibilidad dado a que su familia asegura que no tenía ninguna vinculación con alguno de esos grupos.
El obispo manifestó que en torno al problema de las pandillas, integradas según la policía por más de cinco mil jóvenes, "creo que de las cosas más peligrosas es pensar que con más policías, con más cárceles" se podría encontrar la solución.
Sostuvo que ese "es un camino equivocado, hay que dar a la gente facilidades para que puedan reformar sus vidas en forma digna, el otro camino es equivocado, es ilusorio y no hace más que agravar el problema, es como querer apagar el fuego con gasolina".
Rosa Chávez dijo que la zona céntrica de San Salvador "se ha deteriorado" con numerosos casos de prostitución, alcoholismo, violencia juvenil, tráfico de drogas y otras acciones del crimen organizado.
Indicó que debe preguntarse "qué está pasando con la sociedad salvadoreña y la solución supone ir a las causas y dar a los jóvenes una oportunidad, hay un problema social gravísimo". Las autoridades realizan esfuerzos por encontrar pronta respuesta y solución a la crisis social en ese país. |
