"¿Por qué me dispararon a mí?", fueron las palabras que emitía el mecánico industrial, Tulio Adalberto Amaya, de 46 años, luego de haber recibido un disparo en la espalda, que le cegó la vida, supuestamente de manos de unidades policiales.
El hecho se registró a eso de la 10:30 p.m. del sábado en el área del Veredón en Don Bosco-Veranillo, San Miguelito. Además, un menor resultó herido.
Dayra Carrero, una de las testigos del suceso, dijo ayer que en su casa se registraba una reunión cuando al otro lado del barrio, específicamente en La Providencia, se dio una balacera. Asegura que ordenó subir el volumen de la radio, cuando repentinamente llegaron a su casa un grupo de policías, que sin mediar palabras, dispararon.
"El señor Tulio llegaba de su trabajo uniformado cuando fue impactado en la espalda por los policías. Tras la estampida que se registró, el vecino quedó a un lado de una residencia", dijo Dalia. "Los policías no dejaban llevarlo al hospital y nos largaron del sitio, pero de todas maneras lo trasladamos en un taxi al Hospital San Miguel Arcángel donde murió", agregó.
Carrera indicó que la pared de su casa presenta cinco orificios de bala, alegando que ninguno de los que se encontraba en el lugar de la reunión realizó ningún disparo, porque nadie tenía arma.
"Tulio no se metía con nadie, no era maleante, era un hombre trabajador", dijo enfurecida.
La denunciante reveló que, luego de saber los policías lo que habían hecho, trajeron al lugar a un joven de 18 años de edad al que golpearon, para luego montarle que tenía una escopeta calibre 12.
La hija de Tulio, Alexandra Amaya, pidió justicia a las autoridades, aduciendo que su padre era buena persona.
"Por esto fue la reacción de la comunidad de salir a las calles, para que esto no quedé impune", manifestó.
El sueño de Tulio era terminar su residencia de dos pisos. Tenía un año de laborar como mecánico industrial en la empresa Odebrecht en el Proyecto de Saneamiento de la Bahía.
Dejó en la orfandad a un niño de 8 años y tres hijas de 24, 21 y 20 años.
En tanto, el jefe de la Zona Policial de San Miguelito, el subcomisionado Javier González, indicó que el caso se encuentra en manos de las autoridades competentes, por ende hay que esperar el resultado de la investigación.
Alegó que los uniformados se apersonaron al área, luego de recibir una denuncia de unos intercambios de disparos en el sector, y se detuvo a un sujeto con una escopeta calibre 12.
INVESTIGACIONES
Por este caso hay tres unidades policiales bajo investigación, por parte de la Fiscalía Superior de San Miguelito.