El Carnaval en La Villa de Los Santos es único en la región, porque es sosegado y tranquilo, donde se puede ir en familia y sin el atropello que impera en otros sitios donde la afluencia de público es mayor.
Aquí los culecos empiezan y terminan más tarde que en Las Tablas y Chitré, el agua es abundante y limpia. Los carros cisternas pueden llenarse hasta dos veces cada día, puesto que el caudaloso río La Villa está a sólo un kilómetro de distancia.
Este año se espera la llegada de más de 150 mil visitantes para los cuatro días del Carnaval.