Investigadores del Colegio de Medicina y Neurociencia Albert Einstein en Nueva York han identificado una nueva vía para que el organismo consuma más energía, una enzima que de forma indirecta controla la actividad de lo que los investigadores consideran un "regulador clave de la energía".
Los autores descubrieron que cuando se proporcionaba a los ratones un agente químico para bloquear el funcionamiento de la enzima, conocida como "Fyn quinasa", los animales comenzaban a quemar más grasa.
Según explica Claire Bastie, responsable del estudio, "cuando existe un desequilibrio entre lo que comemos y lo que quemamos, el resultado es la obesidad y el problema es que ésta no se va. Este es un nuevo mecanismo para ayudar al organismo a quemar energía extra".