La Policía de California indicó que la colisión de dos trenes en la costa oeste de Estados Unidos, que dejó doce muertos y unos 200 heridos, fue provocada por una persona que intentaba quitarse la vida.
Randy Adams, jefe policial de Glendale, en las afueras de Los Angeles un individuo perturbado’’, a quien identificó como Juan Manuel Alvarez, de 26 años.
"Creo que este hombre buscaba suicidarse, pero cambió de opinión antes de que el tren llegara a chocar contra su vehículo’’, explicó en una conferencia de prensa.
El sospechoso identificado es residente del barrio de Compton, en el sur de Los Angeles, California. Alvarez está cooperando con las autoridades, que le están interrogando para esclarecer los sucesos que han llevado a esta "calamidad" ferroviaria, como la describió el alcalde de Los Angeles, James Hahn.
El sospechoso intentó quitarse la vida el pasado martes en varias ocasiones, asestando varias puñaladas a su cuerpo e intentando cortarse las venas.
Una vez en el vehículo, que colocó en medio de las vías pero apartado de los pasos a nivel del área por donde cruzan los coches, Alvarez cambió de opinión y se marchó del todoterreno, aunque se quedó en las inmediaciones para observar el accidente. El automóvil fue embestido por un primer tren de cercanías que se dirigía al centro de Los Angeles.
Esta primera colisión hizo descarrilar al tren de pasajeros, que chocó contra una locomotora que circulaba en la vía paralela.
Este segundo choque dejó a uno de los vagones de pasajeros bloqueando la vía contraria, donde fue golpeado por un tercer tren de cercanías que procedía del centro de Los Angeles hacia la localidad de Burbank, barrio contiguo a Glendale.