El hallazgo de 50 esqueletos durante las obras de excavación en terrenos de la Universidad de Kassel mantiene en vilo a la policía y las autoridades de esa ciudad de Alemania.
Uno de los motivos que ha hecho abrir el abanico de teorías es que ninguno de los esqueletos llevaba ropa. Podría tratarse de una fosa común de trabajadores forzosos de una fábrica de munición que se encontraba en ese solar durante la II Guerra Mundial.